El pasado 8 de Octubre, dimos un paseo por el retiro, la primera actividad del grupo senderismo en familia los molinos. Quedamos en la puerta de Dante, a las 12:00 y disfrutamos de una temperatura muy agradable, casi veraniega, durante el transcurso del paseo. El plan era pasar un rato agradable por el retiro, a la vez que aprendíamos algo más sobre su historia y alguna que otra curiosidad.
Un paseo por el Retiro
Lo primero que se visitó, con las explicaciones del guía que nos acompañó en todo momento, fue la rosaleda. Quizás no fuese la mejor época para verla en su esplendor, la primavera es el momento en el que la rosaleda despliega sus encantos. No descartamos que haya que volver, además, los entornos naturales son completamente distintos en cada época del año. Colores, aromas, luz… son factores variantes que hacen que en cada momento del año parezca un parque distinto.
Poco a poco, entre pequeñas pausas para reagrupar el grupo (el senderismo con niños requiere este tipo de pausas); recorrimos los rincones más emblemáticos del jardín. Entre tanto, el guía apuntaba hechos históricos que poco a poco nos descubren la evolución histórica y arquitectónica de tan ilustre parque. Un jardín como el retiro, no solo nos habla de botánica sino también de la historia de la capital y de los protagonistas de esta historia.
Los cambios de lo que se pensó que sería el retiro, a lo que ha llegado a ser, son, sin duda, un reflejo de los cambios sociales que han acompañado al parque. O al revés, los cambios de la sociedad han ido forzando cambios en el jardín, para adaptarse a las nuevas necesidades del público. Un parque vivo, que ha crecido con madrid y se ha transformado con sus gentes.
Durante el recorrido, las explicaciones se apoyaron en fotos; lo cúal es sumamente enriquecedor dado que uno puede comprobar in situ, lo que era y lo que es. Los planos históricos, bocetos, notas de prensa… son una enciclopedia que nos habla de la historia y cambios del jardín. El uso de micrófono y auriculares para los asistentes hizo que nadie se perdiese ninguna explicación, sin perturbar al resto de visitantes del parque.
Finalizó la expedición en el casón del buen retiro, con las explicaciones sobre cómo desde ese punto se inició lo que hoy conocemos como uno de los pulmones de madrid, y uno de los sitios más visitados por turistas (y locales). Finalizada la actividad, muchos aprovecharon para seguir por el retiro, hacer un picnic o continuar de paseo por otros rincones de Madrid.
Además de lo que pudimos aprender, el paseo fue una gran ocasión para que los más peques del grupo jugasen y se lo pasasen en grande entre los laberintos, que para un niño suponen los paseos por retiro. Dos horas que supieron a poco, dado que sobre el retiro siempre queda algo más que ver o algo más que aprender de su historia. Como no, también hubo momento para la toma de instantáneas familiares, no podía ser de otro modo. Quizás, una cosa que se nos quedó en el tintero, fue el remar en el estanque.
¡Os esperamos en nuestra siguiente actividad!